Ahora sí, ¡a cocinar!
1. Comienza agregando a la licuadora una taza de leche de almendras, una taza de mango Ultraorganics y una cucharada de extracto de vainilla. Licúa hasta obtener una mezcla suave, cremosa y con un aroma irresistible. Este será el corazón de tu pudín.
2. En un tazón amplio, vierte el puré de mango que acabas de preparar y añade 1/4 de taza de semillas de chía. Mezcla con calma y cuidado, asegurándote de que las semillas se integren por completo. Este paso es clave para lograr la textura perfecta, así que no te saltes ningún rincón del tazón.
3. Cubre el tazón con un paño o tapa y colócalo en el refrigerador. Déjalo reposar durante al menos 4 horas o, si puedes, toda la noche. Durante este tiempo, las semillas de chía absorberán el líquido y se convertirán en un pudín naturalmente espeso, suave y lleno de fibra y nutrientes.
4. Al momento de servir, dale tu toque personal. Agrega más mango Ultraorganics en cubitos, una pizca de coco rallado, semillas, granola o lo que más te guste. Cada bocado será una explosión de frescura, textura y nutrición.
¡Listo!
Un postre que nutre desde adentro, con el poder natural del mango Ultraorganics.